MOLÉCULA M

AGRADECIMIENTOS

A mi mujer, Mónica, y a mis hijos, Alfredo y Rocío,
quienes me animaron a publicar este libro, que nació como un experimento, un reto personal y una forma de ocupar mi mente en horas de ocio, y terminó transformándose, poco a poco, en una historia que nos atrapó, nos divirtió y nos conquistó a todos.
Y a mi madre, a la que siempre llevo en mi corazón.

Cuando terminé de escribir este libro, que ha sido una especie de experimento sin más pretensión que la de divertirme y entretener a unos cuantos amigos que esperaba que se lo leyeran, me encontré ante la pregunta de: «¿A quién debería agradecer por haber escrito esta novela?».
La respuesta no fue inmediata, ya que al principio no supe a quién mencionar y dudé si saltarme este incómodo apartado presente en todos los libros. Sin embargo, de repente, se vinieron multitud de nombres a mi cabeza.
En primer lugar, pensé en mi mujer y mis hijos, quienes me vieron pasar largas horas frente al ordenador, sin saber, realmente, a qué estaba dedicando gran parte de mi tiempo libre. En cuanto se lo confesé y les conté de qué trataba la novela, me animaron a continuar e incluso esperaban con ilusión que les explicara las últimas ocurrencias que iba imaginando mientras la escribía. Gracias por vuestro apoyo incondicional, por animarme a publicarlo y que no se quedara como un fichero Word olvidado en el disco duro de mi portátil.
También pensé en mi padre, mi hermano y algunos amigos, quienes se han convertido en mis lectores «cobayas», ofreciéndome sus opiniones y consejos para corregir errores y mejorar la redacción. Os agradezco profundamente vuestro tiempo e interés, incluso a aquellos que no lo habéis leído a pesar de mi insistencia, con la excusa de que preferís esperar a que salga la película.

Y no quiero olvidarme de aquellos que no me conocen personalmente, pero que han sido una gran fuente de inspiración para la creación de mis personajes y la ambientación de la trama de la novela. Me refiero a uno grupo de fantásticos YouTubers, que tienen la increíble capacidad de transmitir aromas, olores, emociones y sentimientos, a través de los videos y reseñas que publican en sus redes sociales sobre perfumes.
Vosotros tenéis una gran culpa de que me haya «enganchado» a los perfumes. Mi mujer ya se pregunta si no tendré el «síndrome de Diógenes» de las colonias, al ver que mi colección aumenta y aumenta, quitando espacio en el armario del baño, a otras cosas que seguramente sean mucho más importantes. Por ello, os quiero agradecer sinceramente vuestro trabajo y la pasión con la que lo hacéis, especialmente a:
- Carlos Rubio: “Carlos Rubio” en YouTube: @CarlosRubioPerfumes
- Gabriel: “Fragaby” en YouTube: @FragabyPerfume
- Ernesto: “Perfumones” en YouTube: @perfumones
- José Antonio: “El Mono Perfumado” en YouTube: @elmonoperfumado
- Juan: “Huéleme Mucho” en YouTube: @HuelemeMucho
- Mario: “Fragancias en la Patagonia” en YouTube: @fraganciasenlapatagonia
- Jorge: “Jorge Parfum” en YouTube: @JorgeParfum
- Chedd Noir: “Chedd Noir” en YouTube: @CheddNoir

Y, por último, a ti, que tienes el libro entre tus manos y por alguna razón has decidido invertir tu tiempo en leerlo en lugar de dedicarlo a hacer cualquier otra cosa.
Espero que te entretenga, que te ayude a reflexionar sobre la importancia del dinero, la amistad y la ambición desmedida, y que por un instante, pienses qué harías tú, si fueras alguno de los protagonistas de la novela y te tuvieras que enfrentar a una situación tan surrealista como la que les ha tocado vivir.
Pero, sobre todo, deseo que te divierta.
Muchas gracias.
Alfredo Barrera Martín